¿Qué es una instalación eléctrica biocompatible?
Una instalación eléctrica biocompatible es un sistema diseñado para minimizar el impacto negativo de las instalaciones eléctricas en la salud humana y el medio ambiente. En la actualidad, estamos expuestos a una amplia variedad de radiaciones eléctricas y magnéticas, procedentes de dispositivos como redes WiFi, teléfonos móviles, electrodomésticos, microondas y placas de inducción. Estas radiaciones pueden afectar a nuestro bienestar, ya que el cuerpo humano también produce pequeñas corrientes eléctricas en sus procesos biológicos.
La instalación eléctrica biocompatible busca reducir la exposición a campos eléctricos y magnéticos, así como eliminar la presencia de compuestos tóxicos que contienen las instalaciones convencionales. Esto es especialmente relevante en hogares, oficinas y centros de salud donde se pasan muchas horas. En ANBOC, nos comprometemos a utilizar instalaciones eléctricas biocompatibles en nuestras construcciones, garantizando así espacios más saludables y sostenibles para nuestros clientes.
¿Por qué diseñar una instalación eléctrica biocompatible en una casa?
La necesidad de diseñar instalaciones eléctricas biocompatibles es más urgente que nunca. Existen evidencias que sugieren que la exposición continua a radiaciones no controladas puede causar dolores de cabeza, ansiedad, fatiga e incluso trastornos más graves. Por ello, es fundamental que arquitectos e ingenieros conozcan las pautas y premisas básicas para llevar a cabo este tipo de instalación durante la fase de proyecto.
Beneficios de las instalaciones eléctricas biocompatibles
Diseñar una instalación eléctrica biocompatible es crucial para crear un entorno saludable. A continuación, te contamos algunos de los principales beneficios:
- Reducción de la exposición a radiaciones: Con el incremento de dispositivos que emiten radiaciones eléctricas y magnéticas, como teléfonos móviles, WiFi y electrodomésticos, es vital reducir la exposición a estas radiaciones. Las instalaciones biocompatibles están diseñadas para minimizar este riesgo.
- Mejora de la salud y el bienestar: Las radiaciones eléctricas pueden interactuar con las cargas eléctricas de nuestro cuerpo, provocando síntomas como dolores de cabeza, ansiedad, fatiga y problemas de sueño. Al implementar una instalación eléctrica biocompatible, se pueden prevenir estos efectos adversos.
- Calidad del sueño: Al eliminar los campos electromagnéticos en áreas como dormitorios, se favorece un descanso más reparador. Esto es esencial para la recuperación del organismo, especialmente durante las horas de sueño.
- Sostenibilidad: Las instalaciones biocompatibles utilizan materiales ecológicos y prácticas sostenibles que contribuyen a un menor impacto ambiental. Esto es especialmente importante en un mundo donde la sostenibilidad es clave para el futuro del planeta.
- Eficiencia energética: Estas instalaciones tienden a ser más eficientes, lo que no solo reduce el costo de la factura eléctrica, sino que también minimiza el impacto ambiental asociado con el consumo de energía.
Principales recomendaciones para el diseño:
- Instalar una buena toma de tierra
La toma de tierra es un elemento clave en cualquier instalación eléctrica. Se trata de un conjunto de conductores que desvía las corrientes y tensiones erráticas, protegiendo tanto los aparatos eléctricos como a los usuarios. Una toma de tierra de calidad, bien instalada, puede reducir significativamente la exposición a campos eléctricos. - Utilizar una red doméstica adecuada
Las redes eléctricas pueden clasificarse en dos tipos: TT y TN.- Redes TT: El neutro no está conectado a la toma de tierra, lo que protege las instalaciones sanitarias y reduce la contaminación de la red pública.
- Redes TN: Estas tienen un puente entre el neutro y la tierra, lo que puede causar desequilibrios. De estas, las redes TN-S y TT son las más recomendadas para instalaciones biocompatibles, ya que limitan la creación de campos eléctricos.
- Buena disposición del cableado
La disposición del cableado en una vivienda también es crucial. Se recomienda un sistema en estrella, donde todo parte de un único punto de alimentación, lo que reduce la longitud de los circuitos y, por ende, los campos generados. Además, instalar circuitos independientes de iluminación y tomas de corriente en cada habitación permite desconectar estancias para reducir la exposición durante el descanso. - Utilizar cables con blindaje eléctrico trenzado
Los cables blindados tienen una malla metálica que ayuda a reducir los campos eléctricos. También es posible optar por cables trenzados que eliminan los campos magnéticos producidos por la corriente alterna. Es crucial que toda la instalación esté bien conectada para que este tipo de cables sean efectivos. - Instalar un desconector de red
Un desconector de red permite cortar el suministro eléctrico cuando no es necesario, eliminando campos eléctricos innecesarios. Existen modelos manuales y automáticos que se activan cuando no hay consumo. Esto es especialmente útil en zonas de descanso para minimizar la exposición.
Después de implementar las características técnicas, es vital adoptar prácticas cotidianas que favorezcan la bioconstrucción:
- Zonas de estar y dormitorios libres de campos: Las áreas donde se descansa deben estar libres de campos electromagnéticos durante el sueño. Es recomendable revisar las instalaciones y considerar la instalación de desconectores de red en estos espacios.
- Utilización responsable de los aparatos domésticos: Comprobar que los electrodomésticos tengan cable de tierra es esencial para desviar corrientes erróneas. Además, evitar dejar dispositivos en modo stand by y desconectarlos cuando no se usan ayuda a reducir la exposición a campos eléctricos.
Optar por una instalación eléctrica biocompatible es una decisión inteligente y responsable que no solo cuida nuestra salud, sino que también promueve un entorno más sostenible. Si estás interesado en instalar un sistema eléctrico que cumpla con estos criterios, contacta con nosotros en ANBOC.